Cómo entrenar con material que tienes en casa
Si quieres hacer ejercicio, no debes pagar un gimnasio o clases de cierta disciplina. ¡Puedes entrenar con material que tienes en casa! Lo que sí has de tener en cuenta es que la rutina hogareña es más propensa al abandono. Aprovecha que no es necesario salir y que puedes hacer actividad física en cualquier momento del día.
¿Por qué entrenar en casa?
Esta es la principal pregunta que todos se hacen cuando por algún motivo (por ejemplo bajar de peso o mejorar la salud cardiovascular) se dan cuenta de que necesitan hacer ejercicio. Cada vez son más las personas que optan por armar un gimnasio en casa debido a sus múltiples beneficios.
Como primera medida, porque te ahorra tiempo. No tendrás que utilizar minutos para dirigirte hasta un gimnasio, aparcar el coche o esperar el metro o el autobús. Según la distancia en que te encuentres del centro de fitness, hacer ejercicio en casa te ahorra alrededor de una hora por día en desplazamientos.
No hace falta que adaptes tu vida a los horarios del gimnasio: ¡porque tu casa siempre está abierta! Esto significa que puedes entrenar a las 5 de la mañana o a las 10 de la noche, también los fines de semana y los días de fiesta.
Además, es perfecto porque puedes aprovechar para hacer otras actividades, como por ejemplo la colada o incluso para cuidar de tus hijos pequeños. ¡Hay rutinas que incluyen niños como pesas! Realmente curiosas y divertidas.
Fundamentalmente, dejarás de lado las excusas para no entrenar: llueve, hace frío o calor, es muy tarde o temprano, me queda lejos, tengo que usar el autobús, la clase comienza a tal hora… ¡Por fin eso queda desterrado!
Lo que sí debes tener es mucha motivación, voluntad y compromiso para entrenar en casa. Porque la televisión, el sofá, una siesta o el último capítulo de tu serie favorita pueden ser las principales distracciones o impedimentos. ¡Concéntrate en tu objetivo!
Por último, aunque no por ello menos importante: ahorrarás bastante dinero porque no tendrás que pagar por mes o por clase como en un gimnasio. Es verdad, que en algunos casos precisarás hacer una inversión inicial para adquirir algunos complementos, pero eso no es imprescindible. Existen materiales que hay en casa que te pueden servir sin problemas.
Se puede entrenar con material que tienes en casa
Por supuesto que sí. Incluso encontrarás elementos que ni te imaginabas podían servir para hacer ejercicio. Solo es cuestión de mirar a tu alrededor y dejar ‘volar la imaginación’ para convertir lo que tienes en un complemento como los del gimnasio.
1. Para ejercicios de brazos: toallas y palos
No es necesario que compres una barra, para empezar puedes usar lo que dispones en tu hogar. Las toallas de baño enroscadas o los palos de la fregona sirven como reemplazo en los ejercicios de brazos (bíceps, tríceps) o espalda.
Es verdad que no tienen peso… ¡Pero también lo puedes añadir! Las toallas se pueden mojar y al palo le puedes añadir dos botellas de agua con asas en los extremos.
2. Para ejercicios de fuerza: bolsos y botellas
Quizás conoces ese chaleco lastrado que se usa en el gimnasio para hacer sentadillas, zancadas o peso muerto. ¿Qué te parece si utilizas un bolso o mochila con asas resistentes y lo rellenas con paquetes de arroz o pasta?
Otra opción son las botellas de plástico de diferentes tamaños. Rellénalas con arena, agua o tierra y utiliza como reemplazo de mancuernas y discos.
3. Para ejercicios cardiovasculares: sillas y escaleras
¿Sigues pensando que no se puede entrenar con material que tienes en casa? En el caso de que quieras hacer un poco de cardio, siempre puedes emplear escaleras, cajones, sillas o bancos pequeños que te sirvan como steps. Pon una buena música… ¡Y a moverse se ha dicho!
Si tienes niñas en casa, probablemente tengan una cuerda para saltar. Aprovecha para usarla al inicio de la rutina, para entrar en calor. Y si hay niños, pídele prestado un balón. Hay muchos ejercicios que lo incluyen.