La Federación Española de Espeleología

Las federaciones deportivas no siempre prosperan, y en algunos casos, pueden llegar a su final. Es el caso de la Federación Española de Espeleología.

A mediados de 2015, los amantes de espeleología y los españoles en general recibieron una noticia lamentable. Tras extensos análisis financieras y discusiones jurídicas, se hizo oficial la liquidación de la Federación Española de Espeleología (EEE).

Frente al desafío de seguir impulsando la actividad, las federaciones autonómicas se vieron obligadas a apostar por la unión. Así, 11 de las 15 entidades locales se han agrupado en la Confederación de Espeleología y Cañones (CEC) para seguir ofreciendo asistencia a los profesionales y aficionados, bien como a los clubes esparcidos por todo el territorio nacional.

Aunque jamás sea un panorama ideal funcionar sin la regulación y el respaldo de un organismo nacional, las federaciones siguen ‘dando pelea’. Después de tan solo un año de su incorporación, el CEC ha logrado el reconocimiento de la Unión Internacional de Espeleología y de la Federación Europea.

Causas de la liquidación de la Federación Española de Espeleología

Para muchos, aún parece increíble que un territorio soñado para esta actividad como lo es España haya tenido que asistir a cómo cerraba las puertas su principal órgano regulador y promotor. No obstante, su supervivencia ha sido considerada como ‘inviable’ por su máximo acreedor, el mismísimo Consejo Superior de Deportes (CSD).

Y es que, allá por el 2015, el organismo acumulaba una deuda superior a 400 000 euros con el Consejo, incluso después de haber intentado aliviar su morosidad mediante la venta del Centro Especializado de Tecnificación Deportiva de Espeleología en Ramales de la Victoria. Irónicamente, fue la venta del albergue de dicho centro lo que retrasó la conclusión de la liquidación.

Por otra parte, el CEC pudo adquirir, a través de una subasta del concurso de acreedores del CSD, la biblioteca y las memorias de la REE. Pero para su coordinador, Hilario Ubiedo, este ha sido otra de las incoherencias durante el proceso de liquidación; después de todo, necesitaron pagar por algo que ya les debería pertenecer por derecho.

Más allá de ello, este esfuerzo económico estaría justificado con la posibilidad de conservar horas irreparables de investigación y trabajo de tantos profesionales. También para resguardar una parte esencial de la historia de la espeleología en España, que está intrínsecamente conectada con el desarrollo de la humanidad.

Polémicas sobre la liquidación de la REE: ¿habría sido una decisión política?

Como estamos viendo, la liquidación de la Federación Española de Espeleología ha estado atravesada por polémicas, acusaciones y enfrentamientos. Para su antiguo presidente, Juan Carlos López Casas, esta ha sido una decisión política del Gobierno, y no meramente una cuestión económica.

Según el extitular, el organismo podría haber afrontado la deuda caso el CSD se hubiera mostrado más flexible. Además, apunta a que los inmuebles ofrecidos difícilmente saldarían la deuda integral. Más de una vez, López Casas ha apuntado directamente contra el Gobierno, afirmando que no le interesa mínimamente la espeleología.

También se ha dado a entender que el voto negativo del Consejo al acuerdo propuesto por la REE habría estado motivado por intereses políticos y no por desequilibrios financieros en sus concursos de acreedores, que comprendían a más de 60 federaciones deportivas.

En respuesta a estas acusaciones, el entonces director del Consejo, Fernando Puig, ha reafirmado la inviabilidad del acuerdo. Además, resaltó que los miembros del CSD han tomado la postura correcta desde el punto de vista del interés público.

Se argumentó que la REE era incapaz de demonstrar poseer los recursos necesarios para afrontar la deuda. Y en todo caso, según Puig, la liquidación derivó de una orden judicial, no de la mera voluntad del Consejo.

Las federaciones autonómicas después de la REE

Como adelantábamos, las federaciones autonómicas han sido directamente afectadas por la desaparición de la REE. Pero antes de la liquidación, estas instituciones ya enfrentaban las consecuencias del endeudamiento de su principal organismo regulador con el Consejo.

Por ejemplo, cuando la propia REE pretendió imponer el pago de cuotas diferenciadas para cada entidad autonómica, para aumentar su recaudación. Y frente a la negativa de 11 de ellas, que consideraron irregular el cobro de dichos importes, se decidió expulsarlas de forma unilateral y totalmente arbitraria.

En este momento, las autonómicas recurrieron al CEC y ganaron su respaldo. Desde entonces, siguen trabajando por el fomento de la espeleología en España y vienen demostrando que un todo no puede funcionar armoniosamente sin la cooperación de cada una de sus partes.

La solución parece ser la creación de un nuevo organismo regulador a nivel nacional, pero que esté alineado con las federaciones autonómicas. Principalmente en los procesos de tomas de decisiones que afectan la actividad a nivel nacional y el funcionamiento de sus representantes.