¿Por qué no es bueno tomar cerveza después de correr?
Durante años se afirmó que consumir cerveza después de correr podía ser una buena idea para mejorar el estado de hidratación e iniciar el proceso de recuperación muscular. El contenido en carbohidratos de la bebida resultaría esencial para reponer el glucógeno perdido, según estas teorías.
Sin embargo, en la actualidad se ha descartado por completo esta hipótesis. El punto clave para desaconsejar la ingesta de cerveza es su contenido en alcohol. Esta sustancia resulta tóxica independientemente de la dosis consumida y puede afectar negativamente al proceso de recuperación tras un esfuerzo.
Los efectos nocivos del alcohol
Lo primero que hay que tener claro es que no existe una dosis de alcohol saludable; se trata de una sustancia que perjudica al organismo en cualquier condición. Por este motivo, lo mejor es retirarla de la dieta, o de lo contrario se podrían experimentar patologías a medio plazo derivadas de su consumo.
El alcohol afecta negativamente al estado de hidratación. Esto resulta nefasto tras la realización de un esfuerzo, ya que reponer los líquidos perdidos es primordial. Además, cabe destacar que se experimenta una reducción de la síntesis proteica, algo que condiciona la función muscular. Así lo evidencia un estudio publicado en Journal of Functional Morphology and Kinesiology .
Es importante asegurar que, tras la práctica de una actividad física, se aporten los líquidos y nutrientes necesarios para reponer todo lo que se ha perdido. Si no se cumple esta premisa, el riesgo de lesión en eventos posteriores se incrementa de manera alarmante. Por otra parte, se pueden bloquear las señales de adaptación, lo que impide que se incremente el rendimiento progresivamente.
No se debe beber cerveza después de correr
A la hora de planificar la nutrición posterior a una actividad física, conviene garantizar el consumo de nutrientes de alta calidad y valor biológico. Lo más adecuado es que se ingieran proteínas de origen animal, carbohidratos de bajo índice glucémico, grasas de tipo insaturado y vegetales de color rojo.
Asimismo, la mejor bebida es el agua mineral. Es cierto que se pueden incluir algunas alternativas como las bebidas deportivas o como los batidos de proteínas. No obstante, todos estos elementos están diseñados específicamente para favorecer la recuperación. En ningún caso afectan negativamente a la síntesis proteica o de glucógeno, sino todo lo contrario.
Si se introduce cerveza después de la práctica deportiva, se experimentará una alteración de los niveles hormonales, sobre todo en los hombres. Es posible que la concentración de testosterona se reduzca, mientras se incrementa la de cortisol. Este proceso genera un incremento de los niveles inflamatorios, contrarios a lo que se debería buscar para una buena recuperación.
Aunque existen evidencias de que la ingesta de alcohol no afecta negativamente a la potencia muscular en eventos posteriores, se bloquearán los mecanismos que generan hipertrofia, por lo que el rendimiento tampoco aumentará. Lo máximo a lo que se puede aspirar en este contexto es a no perder masa magra. Todo ello teniendo en cuenta que la exposición al tóxico sea puntual y no crónica.
No es bueno incluir cerveza en la dieta
Además de evitar el consumo de cerveza después de correr, conviene evitar la ingesta de esta bebida en cualquier momento del día. Esta recomendación es extensible a todos los productos que contienen alcohol, dado que este tóxico se relaciona con un mayor riesgo de desarrollar patologías crónicas y complejas a medio plazo.
Por otra parte, hay que destacar que la cerveza es una bebida que podría provocar malestar digestivo en aquellas personas que hayan desarrollado sensibilidad al gluten. Esto se debe a que se trata de un preparado a base de cereales que puede resultar pesado a nivel estomacal e intestinal.
Evita consumir cerveza después de correr
Según has podido comprobar, no es positivo consumir cerveza después de correr. Lo mejor para recuperarse de una sesión de trabajo físico es el agua mineral, junto con una comida bien planteada que aporte nutrientes esenciales. Si no se cumple esta recomendación, se incrementará el riesgo de lesión en eventos posteriores y se verá mermado el rendimiento deportivo.
Por último, ten en cuenta que también es bueno restringir la presencia de refrescos en la dieta, además de las bebidas alcohólicas. Estos productos se consideran nocivos para la salud, ya que impactan negativamente sobre las glucemias sanguíneas.
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