¿Cómo hacer la dieta de pollo y brócoli para bajar de peso?
La dieta de pollo y brócoli permite bajar de peso de manera eficiente en un par de semanas. Supuestamente no cuenta con efectos nocivos para la salud, aunque los expertos en nutrición suelen desaconsejar esta serie de planes muy restrictivos. Normalmente no generan adherencia y pueden conllevar déficits en cuanto a nutrientes esenciales. De todos modos vamos a enseñarte en qué consiste dicho planteamiento y cómo se puede poner en marcha.
Antes de comenzar has de tener en cuenta que adelgazar es un proceso que no se debe tomar con prisa. Lo mejor es plantear una serie de buenos hábitos mantenidos a lo largo del tiempo, para de este modo consolidar un cambio en el estado de composición corporal que sea sostenible. Hay que tener mucho cuidado con las modas y con las recetas milagrosas, ya que habitualmente no suelen dar buen resultado.
La dieta de pollo y brócoli
Como hemos comentado, la dieta de pollo y brócoli es un plan de alimentación que se puede mantener durante 10 o 14 días y que promete una pérdida de peso rápida. Se basa fundamentalmente en el consumo de carne y de vegetales para lograr así estimular los procesos de oxidación de grasas, creando también un entorno hipocalórico. Ahora bien, no solo basta con esto, sino que habrá que realizar también un mínimo de ejercicio.
Para ponerla en marcha bastaría con comenzar a comer pollo y brócoli en la cantidad deseada en todas las comidas principales del día. También se puede sustituir esta crucífera por algún otro vegetal en ciertas ocasiones, como las zanahorias, la coliflor o los tomates. Ahora bien, está claro que el brócoli es una buena fuente de vitaminas y de compuestos con actividad antioxidante.
La parte buena de este régimen dietético es que no presta atención a las cantidades consumidas, por lo que en este sentido puede llegar a generar cierta adherencia. Las personas que la pongan en práctica no tienen por qué pasar hambre, aunque es cierto que pueden acusar la monotonía del planteamiento.
Beneficios de la dieta de pollo y brócoli para perder peso
Está claro que para conseguir perder peso de manera eficiente es necesario generar un marco hipocalórico. De este modo se movilizarán y se oxidarán las grasas, lo que contribuirá a la reducción del tejido adiposo. Ahora bien, es determinante conseguir satisfacer los requerimientos proteicos diarios para evitar que se catabolice tejido muscular, algo que a medio plazo sería negativo. Estos se estiman en al menos 1,4 gramos de proteína por kilo de peso al día en personas deportistas, según un estudio publicado en Journal of the International Society of Sports Nutrition.
Por otra parte, el consumo de vitaminas y de fitoquímicos es importante para evitar alteraciones fisiológicas que condicionen negativamente el estado de salud a medio plazo. El brócoli es fuente de ambos elementos. Los antioxidantes son capaces de neutralizar la formación de los radicales libres y su posterior acumulación en los tejidos del organismo, lo que se asocia con una menor incidencia de las patologías crónicas y complejas. Así lo evidencia una investigación publicada en la revista European Journal of Medicinal Chemistry.
No obstante, no debes pensar que esta dieta es la solución a todos los problemas de composición corporal. Existen alternativas más saludables y variadas que consiguen buenos resultados a medio plazo, siempre y cuando se acompañen de actividad física. Está claro que garantizar un aporte proteico suficiente y generar un déficit energético marca la diferencia, pero se puede comer variado y alcanzar ambos objetivos.
La dieta de pollo y brócoli, una opción monótona
Como has visto, la dieta del pollo y brócoli puede resultar eficiente para bajar de peso en un escaso periodo de tiempo, pero no resulta para nada una buena solución a medio plazo. Por una parte puede generar déficits en cuanto a nutrientes esenciales derivados de la falta de variedad a nivel de alimentos. Por otro lado resulta muy monótona. Esto puede provocar falta de adherencia y abandono, con un efecto rebote posterior.
Por último hemos de destacar que el hecho de mejorar la composición corporal no siempre resulta sencillo. Cuando se parte de una situación de ineficiencia a nivel metabólico primero habrá que tratar de construir una base sólida en lo que a músculo se refiere antes de centrarse en oxidar grasas en grandes cantidades. Esto puede llevar un tiempo, por lo que hay que focalizar en los buenos hábitos y no frustrarse.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Jäger, R., Kerksick, C. M., Campbell, B. I., Cribb, P. J., Wells, S. D., Skwiat, T. M., Purpura, M., Ziegenfuss, T. N., Ferrando, A. A., Arent, S. M., Smith-Ryan, A. E., Stout, J. R., Arciero, P. J., Ormsbee, M. J., Taylor, L. W., Wilborn, C. D., Kalman, D. S., Kreider, R. B., Willoughby, D. S., Hoffman, J. R., … Antonio, J. (2017). International Society of Sports Nutrition Position Stand: protein and exercise. Journal of the International Society of Sports Nutrition, 14, 20. https://doi.org/10.1186/s12970-017-0177-8.
- Neha, K., Haider, M. R., Pathak, A., & Yar, M. S. (2019). Medicinal prospects of antioxidants: A review. European journal of medicinal chemistry, 178, 687–704. https://doi.org/10.1016/j.ejmech.2019.06.010.