Estos son los beneficios del deporte en niños con TEA
Algo que quizás mucha gente desconoce es que el deporte tiene muchos beneficios para los niños con TEA. La actividad física y los deportes son en general positivos para cualquier persona que los practique, pero en el caso de los niños con un trastorno del neurodesarrollo los aspectos positivos son aún más relevantes.
El Trastorno del Espectro Autista, o TEA, es una etiqueta diagnostica que abarca muchas condiciones heterogéneas. De hecho, los niños con este tipo de alteraciones tienen un desarrollo más diverso que los niños sin dicha condición.
Por otro lado, al tratarse de un trastorno del neurodesarrollo no existe una cura eficaz. Los distintos tratamientos tienen objetivos variados como mejorar la calidad de vida o promover la adaptación de estos niños, pero hasta el momento no es una afección que se pueda revertir con un tratamiento específico. A pesar de esto, un estilo de vida activo es una interesante propuesta para estimular a los niños que lo padecen.
Por ello, a continuación veremos los beneficios del deporte en niños con TEA.
Mejora la coordinación motora
Es cierto que el TEA no tiene una única manifestación y que no hay un niño igual a otro, pero sí hay dos características básicas como las dificultades en la interacción social y los comportamientos e intereses repetitivos.
Además, aunque no es un criterio diagnostico estos niños suelen tener problemas con la coordinación motora. Sus movimientos son a veces imprecisos, lentos o torpes. Esto puede repercutir negativamente sobre su rendimiento académico y sobre la adaptación a la vida cotidiana.
Por esa razón, el deporte es una alternativa interesante para mejorar la coordinación motora, y solucionar también el resto de problemas asociados. Para que sea efectivo es importante que la enseñanza del deporte se haga poco a poco, y teniendo en cuenta el ritmo de progreso del niño.
Adquieren habilidades sociales asertivas
Como se ha dicho anteriormente, los niños con TEA tienen problemas con la interacción social. Normalmente estas dificultades hacen referencia a no ser capaces de generar empatía o ponerse en el lugar de la otra persona, como así también en los problemas para aprender habilidades sociales asertivas.
Los deportes de equipo pueden ser el medio ideal para aprender cómo comunicarse de forma eficaz. En un deporte como el fútbol o el baloncesto la comunicación fluida entre los miembros del equipo es fundamental, y para ello cada persona tiene que tener un nivel mínimo de asertividad.
En línea con lo anterior y según un estudio realizado por la Universidad Rey Juan Carlos, los programas estructurados basados en la actividad física son eficaces para mejorar las habilidades socio-afectivas de los niños con TEA.
Es una forma de canalizar el estrés
Los niños con TEA a menudo se ven abrumados por intentar comprender un mundo que les resulta demasiado complejo e impredecible. Es muy habitual que estos niños sufran estrés por no poder adaptarse a las circunstancias, o por tener dificultades a la hora de expresar sus sentimientos.
La práctica de deporte puede ser una ayuda útil en este sentido. Cualquier persona puede canalizar las emociones a través del deporte, y en el caso de los niños con TEA esto no iba a ser de otra manera.
De acuerdo con un estudio de la Universidad de Granada, los niños con TEA se beneficias especialmente de la práctica de deporte, ya que reduce el nivel de estrés percibido y les permite mejorar en su rendimiento académico.
La práctica de deporte debe ofrecerse a niños con TEA
Hasta aquí se han mencionado los principales beneficios del deporte para niños con TEA, pero no se ha destacado un aspecto importante a tener en cuenta como lo es su magnífica relación beneficio-coste.
Una de las mayores ventajas a la hora de diseñar programas de intervención basados en la actividad física es que suelen ser muy efectivos y poco costosos. Por lo que ponerlos en práctica está al alcance de cualquier institución o entidad deportiva.
El primer paso es detectar aquella actividad que sea del agrado del niño y como inversión solo se requerirá el material necesario para llevar a cabo el deporte. Y sobre todo, muchas dosis de didáctica y paciencia para que los niños puedan internalizar los conceptos para ejecutar la práctica deportiva de manera segura.
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