4 lecciones sobre salud mental que nos deja Simone Biles
Simone Biles no solo es una de las deportistas más laureadas de la historia, también nos ha dado unas lecciones de salud mental que son muy valiosas. Esta gimnasta sabe lo que es tocar tanto el cielo como el infierno, y no solo eso, en ambas situaciones ha sido capaz de aprender de ellas y sacar una crucial lección.
En la historia del deporte pocas gimnastas han conseguido un palmarés similar al del Simone Biles. Esta atleta saltó a la fama en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, cuando tenía nada más que 19 años. Y en los pasados juegos de Tokio, todo el mundo estaba expectante por conocer cuántos oros se iba a llevar, pero tomó una decisión muy valiente: dejar a un lado la competición por un tema de salud mental.
No estamos acostumbrados a situaciones similares, pero sin duda abrió el camino para que los deportistas de élite hablasen más sobre salud mental. Por ello, a continuación repasaremos las lecciones sobre salud mental que nos deja Simone Biles.
1. Una infancia dura no tiene por qué marcarte
La asombrosa historia de Simone Biles comienza en su infancia. Esta deportista no lo ha tenido nada fácil en la vida. Sus padres adictos a la droga no podían hacerse cargo de ella y fue cuidada por sus abuelos con unos recursos económicos bajos. A pesar de no vivir una infancia normal esto no ha sido un obstáculo para que pueda desarrollarse y cultivar la pasión por el deporte.
Esta lección es muy importante para aquellos que crean que desde pequeños todo viene determinado. Esto no es para nada la realidad. Los efectos negativos de una mala época no son permanentes, sino que se pueden revertir. Incluso, la persona puede aprender y dar su mejor versión en la adversidad, lo que se conoce como resiliencia.
2. Los deportistas de élite son por encima de todo personas
Estamos muy acostumbrados a ver a los deportistas de élite como si fuesen seres de otro planeta. No solo por los resultados y lo que son capaces de hacer con sus cuerpos. La industria también se encarga de convertir a las personas en productos, o en publicidad de una marca, y crear la necesidad de comprar para parecernos en algo a ellos. Aunque esto sea una práctica extendida y normalizada pocas veces uno reflexiona sobre el impacto que puede tener para el deportista.
La propia Simone Biles dijo: “somos personas, no entretenimiento”, después de conquistar el bronce en las pasadas Olimpiadas. Esta frase es una obviedad, pero conviene tenerla presente porque muchas veces se tiende a despersonalizar al deportista, reduciéndolo a una forma de entretenimiento. Hay que entender que por encima de todo son personas que tienen sentimientos y que las noticias que se vierten sobre ellos les afectan, como podría afectarle a una persona de la calle.
3. Cuando se trata de salud, hay que pensar primero en uno mismo
La decisión de Simone Biles de retirarse de las Olimpiadas fue algo que eclipsó el resto de la competición. Era difícil de entender cómo una gimnasta que aspiraba solo al oro se retiró justo en ese momento. Después, salió a dar explicaciones: “tenemos que proteger nuestra mente y nuestro cuerpo, y no limitarnos a hacer lo que el mundo quiere que hagamos”.
Cuando se trata de salud la prioridad debe ser uno mismo. En el caso de los deportistas de élite no es fácil conseguir esto, pues uno no solo compite por sí mismo, también por los patrocinadores, reconocimiento y el equipo. Por esa razón cobra más valentía la decisión que tomó la gimnasta. Ella puso su bienestar por encima de cualquier cosa, aun sabiendo que podía perder oportunidades que no volverían a suceder.
4. Después de una mala racha, es posible volver a ser feliz
Los malos momentos son algo inevitable de la vida. Lo que suele ocurrir es que cuando la persona está inmersa en una mala racha tiene la sensación de que nunca se va a volver a recuperar. Simone Biles proporciona el ejemplo contrario, después de haber pasado por un periodo en el que no era feliz hoy en día se ha recuperado y sigue entrenando para competir.
Recuperar la felicidad no es algo que venga de forma pasiva, sino que se tiene que trabajar por conseguirlo. Simone contó con la ayuda de psicólogos, su entrenador y sus compañeras. En definitiva, se rodeó de buena gente y con mucho trabajo personal pudo dejar atrás los nubarrones grises.
Las lecciones de salud mental de Simone Biles son muy inspiradoras
Simone Biles ha demostrado que no solo es una gran deportista, sino una mejor persona. Será siempre recordada tanto por sus éxitos deportivos como por su valentía y calidad humana. Ella abrió el camino para que otros deportistas profesionales pudiesen hablar, o por lo menos reflexionar, sobre su salud mental. Hoy en día el tema de la psicología en el deporte cada vez está más normalizado, pero todavía es necesario seguir haciendo esfuerzos para eliminar el estigma sobre los trastornos mentales.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Tardelli, V. S., Parmigiano, T. R., Castaldelli-Maia, J. M., y Fidalgo, T. M. (2021). Pressure is not a privilege: what we can learn from Simone Biles. Brazilian Journal of Psychiatry, 43, 460-461.