3 preparaciones de recetas de helados Fit
Uno de los postres más sabrosos que existen es el helado. Lamentablemente, la mayoría de las recetas tradicionales están llenas de grasas y carbohidratos que contribuyen a engordar a las personas. Esta es una de las razones por las cuales quienes realizan dietas y ejercicios evitan consumir este dulce.
Comúnmente, las recetas de los helados suelen ser complicadas y requieren de grandes inversiones de tiempo para su elaboración. No obstante, para las preparaciones que aquí presentamos no es necesario complicarse en extremo; ni siquiera hace falta experiencia en la cocina.
En la mayoría de los casos, para preparar estos deliciosos helados fit solo se necesita un poco de imaginación y buenos ingredientes que sirvan de base.
Helados fit: caseros y naturales
Las recetas caseras tienen la gran ventaja de garantizar la calidad de los productos alimenticios. Al mismo tiempo, se logra el objetivo de cuidar el cuerpo y la salud, sin perder la oportunidad de disfrutar de sabrosos platos de una forma práctica.
1. Torta helada de queso con canela
El ingrediente principal de esta receta es media docena de galletas bajas en calorías y sin azúcar. Adicionalmente, se requieren dos cucharaditas de aceite de soja y medio litro de leche descremada, 450 gramos de queso fresco desnatado, un limón, una rama de canela y una cucharadita de esencia de vainilla.
Por último, y para conseguir el efecto cuajado y la textura ideal, se necesitan seis láminas de gelatina natural sin colorantes. De manera opcional, se puede recurrir a algún edulcorante natural.
El primer paso en su elaboración es triturar las galletas hasta que queden como una harina. Luego, añadir el aceite para conseguir una consistencia pastosa.
Tras esto, debemos colocar la masa en un recipiente amplio que permita aplastar la mezcla en la base lo más firme que se pueda. Una vez cumplido este paso, se lleva hasta el refrigerador por espacio de 40 minutos.
En otro recipiente, se mezclan la leche, la rama de canela, un poco de ralladura de limón y esencia de vainilla al gusto. Esta combinación se coloca al fuego hasta que hierva; usando una cuchara, se retira la rama de canela y se deja la mezcla sobre la cocina a fuego bajo. Después, agregar las láminas de gelatina para que se disuelvan y dejar en reposo por dos minutos.
Cumplido este tiempo, se agrega el queso y se bate hasta alcanzar una consistencia homogénea. Se saca del refrigerador el recipiente con la base de la galleta, se vierte la segunda mezcla con sumo cuidado y se lleva de vuelta al refrigerador durante al menos dos horas. Como acabado, se puede agregar alguna mermelada natural.
2. Helado de banana y chocolate
Los ingredientes para esta segunda receta de helados fit son tres bananas y una taza de yogur griego o leche desnatada. Igualmente, añadiremos 30 gramos de chocolate negro sin azúcar o seis cucharaditas de cacao en polvo. De manera opcional, se puede utilizar algún edulcorante natural al gusto.
Para comenzar, se lleva la fruta a la nevera hasta que se comience a congelar. Luego, se trituran y se mezclan con el resto de los ingredientes hasta que alcance un punto cremoso. Para este proceso, se debe utilizar una batidora para garantizar la consistencia adecuada.
Tras esto, se vierte la preparación en un recipiente y se coloca en el refrigerador. Hora y media más tarde, se saca el helado del frío y se remueve la mezcla por unos cinco minutos. Como último paso, se regresa a la nevera; después de 90 minutos, estará listo para comerse.
3. Helado de frutas
De nuevo, tres plátanos sirven de ingrediente principal, esta vez en compañía de siete fresas. Completan la preparación una taza de yogur griego y algún edulcorante natural al gusto.
En primer lugar, se llevan las frutas a la nevera hasta que se congelen. Seguidamente, se trituran y se mezclan con el resto de los ingredientes, hasta conseguir una mezcla homogénea. Por último, se coloca todo en un recipiente y se lleva al refrigerador hasta alcanzar un punto firme.
Como alternativa a los helados fit, la receta anterior puede elaborarse con un mango entero y sumando tres tazas adicionales de yogur griego. El procedimiento es el mismo, con el consiguiente resultado de poder disfrutar de un postre refrescante y estimulante.
Estas recetas de helados constituyen una forma saludable y natural de disfrutar de un bocado dulce. Además, podrás degustarlas sin dejar de lado la alimentación balanceada.