Por qué se saca tarjeta amarilla en el fútbol y cuáles son sus consecuencias

Tras su aparición en la Copa del Mundo de 1970, la tarjeta amarilla ha servido para proteger el espectáculo y promover buenas conductas en el fútbol. Sigue leyendo para que conozcas todo sobre esta cartulina.

En el fútbol existen dos tarjetas muy importantes para sancionar a los jugadores ante conductas antideportivas y fallas tácticas: la roja, que resulta en la expulsión del terreno de juego, y la amarilla, que funciona como una advertencia.

La tarjeta amarilla, en términos generales, comunica al jugador la necesidad de tener precaución con sus acciones a partir de ese momento. ¿Cuáles son las consecuencias específicas de recibirla según el reglamento del fútbol español? Veámoslo a continuación.

¿Qué es la tarjeta amarilla?

La tarjeta amarilla es una herramienta utilizada por los árbitros en un partido de fútbol para comunicarle al jugador una amonestación. Se utiliza para avisarle que ha cometido una falta que va en contra de las reglas del juego.

Estas advertencias oficiales son empleadas para comunicar conductas antideportivas o faltas que no llegan a ser tan graves como para requerir una expulsión.

Según el reglamento de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), los motivos por los cuales un árbitro puede mostrar una tarjeta amarilla a un jugador son los siguientes:

• Una conducta antideportiva, como protestar ante decisiones del árbitro o fingir una lesión.
• Retrasar la reanudación del juego.
• No respetar la distancia en un tiro libre, saque de banda o saque de esquina.
• Infringir las reglas del juego de manera sostenida.
• Ingresar en el terreno de juego sin el permiso del árbitro.
• Abandonar el terreno de juego sin el permiso del árbitro.

En el ámbito del fútbol, los jugadores suplentes también corren el riesgo de recibir una tarjeta amarilla si se involucran en conductas antideportivas, desaprueban las decisiones del árbitro mediante gestos, palabras o acciones, o retrasan la reanudación del partido.

¿Qué pasa cuando un jugador recibe una tarjeta amarilla?

La consecuencia de recibir una tarjeta amarilla es significativa para un futbolista, dado que una segunda tarjeta amarilla en un partido lleva a que el árbitro muestre la tarjeta roja, lo que indica la expulsión del jugador. Esto implica que el equipo se queda con un miembro menos por el resto del partido y es algo que puede afectar la participación del jugador en la competición.

Las reglas del fútbol también contemplan que, debido a la gravedad de la falta cometida, el árbitro opte por mostrar la tarjeta roja directa, lo que significa una expulsión inmediata sin advertencia previa. Por otra parte, cabe mencionar que después de una primera falta sancionada con una amarilla, el jugador podría recibir una tarjeta roja directa por la dureza de la infracción.

¿De dónde viene la tarjeta amarilla?

La tarjeta amarilla tiene su origen en la Copa Mundial de la FIFA Inglaterra 1966, específicamente tras un encuentro entre Inglaterra y Argentina.

Durante el juego, el árbitro alemán Rudolf Kreitlein amonestó al jugador Bobby Charlton sin que nadie se percatara. Esto evidenció la necesidad de crear un método de advertencia más claro. Inspirado en las luces de un semáforo, el árbitro inglés Kenneth George Aston ideó la tarjeta amarilla para comunicar una sanción y la roja para la expulsión.

El nuevo sistema de tarjetas, que perdura hasta hoy en el fútbol, se implementó por primera vez en la Copa Mundial de la FIFA México 1970. El primer amonestado con tarjeta amarilla fue el soviético Kaji Asatiani.

Reglamento de la tarjeta amarilla en España

En la Primera División de España o LaLiga, si un jugador tiene cinco cartulinas amarillas a lo largo de varios encuentros, será suspendido en el partido siguiente.  En un mismo encuentro, un jugador puede seguir disputando el partido siempre y cuando solo haya recibido una tarjeta amarilla.

Si el árbitro amonesta a un jugador con dos tarjetas amarillas, inmediatamente después viene una roja, lo que implica su expulsión. En este último caso, no se contabilizan como dos tarjetas amarillas, ya que la sanción sería la tarjeta roja.

En cambio, si a un jugador le sacan una tarjeta amarilla y luego una roja directa, las amonestaciones sí se computan. Este mismo principio se aplica a las Ligas Segunda, Segunda B y Tercera.

A continuación te ofrecemos la lista de los 10 jugadores más amonestados en toda la historia de LaLiga, hasta febrero de 2024. Asimismo, te compartimos un listado de los jugadores con más cartulinas amarillas en los mundiales de la FIFA.

Cabe destacar que en LaLiga se registran unas 13,2 faltas por partido, así como 48 amarillas y 2 rojas cada jornada. Esta cifra representa la más alta entre todas las grandes competiciones europeas.

Por otra parte, en la Copa del Rey los jugadores quedan exentos de estas sanciones en el momento en que finalizan los cuartos de final.

¿Las tarjetas amarillas deben pagarse?

Las tarjetas amarillas en sí mismas no implican un pago directo por parte del jugador sancionado. Sin embargo, en algunas ligas o competiciones, el club del jugador que es amonestado sí debe hacerse cargo de una sanción económica.

Según el Código Disciplinario de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), «en las competencias de carácter profesional, la sanción de amonestación (…) llevará consigo, para el club de que se trate, multa accesoria en cuantía de 180 euros cuando se trate de equipos adscritos a Primera División, y de 90 euros cuando se trate de equipos adscritos a Segunda División».

Sanciones más recordadas con cartulina amarilla

Algunas de las sanciones con tarjeta amarilla más recordadas del fútbol tienen que ver con arbitrajes en las Copas del Mundo de la FIFA.

Una de ellas es, sin dudas, la cartulina amarilla a Diego Maradona, reconocido como uno de los mejores jugadores de fútbol de la historia, durante la final entre Argentina y Alemania. Cinco minutos antes del final del juego, el árbitro mexicano Edgardo Codesal Méndez sancionó al argentino tras pitar un penalti para Alemania. Con este gol, el equipo europeo venció a Argentina por 1-0.

Otro encuentro colmado de tarjetas amarillas también fue durante un Mundial y, de igual manera, tuvo como protagonista a Argentina. Durante la llamada «batalla de Lusail», el encuentro de cuartos de final que enfrentó al equipo albiceleste con Países Bajos, el árbitro español Antonio Mateu Lahoz emitió el récord de 18 tarjetas amarillas y una roja, la mayor cantidad de cartulinas en cualquier torneo internacional.

El encuentro es recordado como uno de los más emocionantes de todo el certamen, y tuvo episodios como un enfrentamiento verbal entre Lionel Messi y Wout Weghorst durante el posjuego.

En LaLiga española, es recordado el encuentro entre el Granada y el Levante de la temporada 2012-2013, en que el árbitro mostró 16 tarjetas amarillas. Otro partido con una cantidad similar de tarjetas amarillas (14) fue el de Valencia-Espanyol, el mismo año, arbitrado por Carlos del Cerro Grande.

¿Conocías la importancia de la tarjeta amarilla?

Desde su creación en la década de 1960 hasta nuestros días, esta cartulina se ha convertido en un instrumento para regular el comportamiento de los jugadores dentro del terreno de juego.

Aunque la esencia de la tarjeta amarilla es igual en casi todo el mundo, cada torneo o liga y cada región puede tener variaciones en el ciclo de tarjetas amarillas y, por tanto, en las sanciones que se plantean tras su acumulación, así como en el momento en que el conteo pasa a cero.

En síntesis, se puede decir que la tarjeta amarilla representa las intenciones de las autoridades deportivas por fomentar un ambiente de competencia justo y respetuoso en el terreno de juego, lo que le ha dado un grado de importancia y protagonismo en el fútbol mundial.