Los mejores futbolistas brasileños de la historia

Ronaldinho, Neymar, Pelé, Ronaldo y Garrincha son algunos de los mejores talentos que Brasil formó a lo largo de 100 años de fútbol. Conoce los nombres más importantes de los reyes del balón.
Los mejores futbolistas brasileños de la historia

Escrito por Jonatan Menguez

Última actualización: 31 agosto, 2024

Cinco mundiales, nueve títulos continentales, cuatro copas confederaciones y otros tantos galardones juveniles conforman el palmarés de la selección nacional de fútbol más prestigiosa del planeta. Así es, hablamos de Brasil, un país que respira este deporte desde que se popularizó.

Tanta gloria solo puede alcanzarse con un amplio listado de futbolistas fuera de serie. Por esto, te compartimos en este artículo una nómina con los 25 mejores en cuanto a logros, estilo de juego y legado. Sin duda, todos ellos dejaron una marca imborrable en la memoria futbolera.

1. Pelé (1957-1977)

Elegir a los mejores jugadores brasileños de la historia puede ser motivo de debate. Los candidatos sobran y los recortes siempre son un tanto injustos. Sin embargo, hay un aspecto que facilita la tarea: nadie discute a Pelé en la cima.

Edson Arantes do Nascimento, O Rei, es el único futbolista en conquistar tres títulos mundiales (1958, 1962 y 1970).

Con solo 17 años se colocó como emblema de un equipo que llevó a Brasil a la primera gloria en Suecia. Aún hoy mantiene el récord de jugador más joven en anotar y ganar un Mundial. También fue campeón en Chile 62, aunque padeció una lesión que lo dejó afuera en el segundo partido.

Cerró su trayectoria mundialista como líder y figura del mejor Brasil de todos los tiempos, en México 1970. En total, Pelé acumuló 77 goles en 92 partidos con la verdeamarela, lo que lo hace el segundo mayor goleador después de Neymar. Además, conquistó todos los títulos posibles con el Santos durante la década de 1960, equipo donde plasmó la mayor parte de su magia. Cerró su carrera en el New York Cosmos estadounidense.

La FIFA lo eligió como el Jugador del Siglo XX, debate al que solo se anima a subir Diego Maradona. Más allá de las opiniones, la destreza física, mental y la capacidad goleadora del «Rey» se encuentran estampadas en la eternidad del deporte.

2. Garrincha (1951-1972)

Manuel Francisco dos Santos, o Mané Garrincha, tiene una historia bastante particular. También fue bicampeón del mundo en Suecia 1958 y Chile 1962, con un gran protagonismo en este útimo cuando Pelé cayó lesionado.

Garrincha se convirtió en goleador y figura del Mundial de Chile, al punto que lo eligieron mejor jugador del certamen.

Desarrolló su carrera principalmente en el Botafogo, donde anotó más de 100 goles y consiguió numerosos títulos a nivel local. Sin embargo, Garrincha fue mucho más que estadísticas. Nació con una deformidad en sus piernas, que lo llevó a una temprana operación y a un diagnóstico negativo como futuro futbolista.

No obstante, utilizó esa condición a su favor. Desarrolló habilidades únicas como regateador y un estilo de juego «divertido» que le valió el mote de «alegría del pueblo». Tanto es así que muchos lo consideran como el mejor puntero derecho de la historia y el más experto en el arte de engañar rivales.

Por todo esto, fue seleccionado en el segundo equipo del Dream Team del Balón de Oro, junto a Johan Cruyff, Alfredo Di Stéfano, Zinedine Zidane y Ronaldinho. Como dato extra, nunca perdió un partido jugando con Pelé en cancha.

3. Ronaldo (1992-2011)

Para las generaciones actuales, el apellido Ronaldo se asocia con Cristiano. Y no se trata de una injusticia, dado que el portugués se convirtió en una de las principales leyendas del deporte. Sin embargo, el primer Ronaldo que dio de que hablar fue Ronaldo Luís Nazário de Lima, futbolista que se ganó el mote de «fenómeno». Esto fue gracias a su capacidad integral como delantero: potencia, velocidad, precisión, gambeta, hambre de gol.

En la década de 1990, Ronaldo inició una trayectoria de crack en el Cruzeiro de Brasil, el PSV neerlandés, el Barcelona y el Inter de Italia. Formó parte del plantel campeón en el Mundial de Estados Unidos 1994, aunque como relevo. En Francia 1998 fue elegido mejor jugador del certamen, pero es recordado su mal desempeño en la final, debido a que sufrió convulsiones en la previa.

Luego de este hecho, las lesiones interrumpieron buena parte de su carrera, aunque el fenómeno supo reivindicarse en 2002.

Lideró al Brasil campeón del, hasta ahora, último mundial. Marcó ocho tantos, dos de ellos en la final ante Alemania.

Gracias a esto, lo galardonaron con el Balón de Oro de aquel año, premio que ya había obtenido en 1997. En los 2000, fue figura del ataque en el Real Madrid «galáctico». Por si fuera poco, es el segundo máximo anotador de la historia de los mundiales, con 15 goles, uno debajo del alemán Miroslav Klose.

Además, fue elegido para integrar la delantera del Dream Team del Balón de Oro, junto al Ronaldo luso y a Messi. Se trata del mejor equipo de todos los tiempos, seleccionado por 140 periodistas de todo el mundo e impulsado por la revista France Football.

4. Ronaldinho (1998-2015)

Ronaldo de Assis Moreira, más conocido como Ronaldinho Gaúcho, es sinónimo de fútbol vistoso. Cualquiera que lo haya visto con una pelota no podrá olvidar su alegría para jugar, sensación que transmitía al público.

Ronaldinho se divertía con amagues, giros y fantásticas jugadas que, lejos de tener por objetivo ofender al rival, eran efectivas para el equipo. Con solo 22 años, conformó el tridente mágico de la Copa Mundial 2002, junto a Rivaldo y Ronaldo. Integró el equipo ideal del certamen y le convirtió un inolvidable tanto de tiro libre a Inglaterra en cuartos de final. A nivel clubes, su época dorada fue en Barcelona, donde alcanzó la Liga de Campeones en 2005-06 y el Balón de Oro.

Ronaldinho fue un referente del astro argentino Lionel Messi, a quien le transmitió el liderazgo futbolístico del equipo.

5. Cafú (1989-2008)

La selección brasileña tuvo dos épocas doradas. La primera fue la de Pelé y la segunda abarca desde 1994 hasta 2002, cuando conquistó los dos mundiales restantes del quinteto. Más allá de las leyendas creativas y goleadoras que llevaron Brasil a la gloria, quizás la figura más insistente en esta segunda era sea la de Cafú.

Era un defensor lateral derecho veloz, filoso y con una sobria capacidad para defender y atacar. No por nada se convirtió en el único futbolista en disputar tres finales consecutivas. Además, es el brasileño con más partidos en la selección: acumuló 142, en los que marcó cinco goles. Al igual que Ronaldo, integra el mejor equipo de la historia según France Football.

Marcos Evangelista de Moraes, su nombre real, ganó todo. Y no de forma metafórica. Es de los pocos en levantar los trofeos más importantes del fútbol. Vale mencionar los más destacados:

  • Brasileirao (San Pablo, 1991).
  • Copa Libertadores (San Pablo, 1992 y 93).
  • Copa Intercontinental (San Pablo, 1992 y 93).
  • Copa del Mundo (Brasil, 1994 y 2002).
  • Copa América (Brasil, 1997 y 1999).
  • Copa Confederaciones (Brasil, 1997).
  • Serie A de Italia (Roma, 2001 y Milan, 2004).
  • Champions League (Milan, 2006-07).
  • Mundial de Clubes (Milan, 2007).

6. Romário (1985-2008)

No caben dudas: los dos delanteros estrella de la segunda era dorada brasileña son Ronaldo y Romário. La verdeamarela no habría llagado a la cuarta estrella mundialista en 1994 sin la ayuda de los goles de Romário, quien fue elegido el mejor jugador del certamen.

Asimismo, conquistó dos copas América y una Copa Confederaciones con su país. A nivel clubes, triunfó y marcó múltiples goles con todas las camisetas que defendió: Vasco da Gama, PSV de Países Bajos, Barcelona y Valencia, entre las más destacadas.

Con Romário, el arco se agigantaba. De estatura baja y contextura pequeña, pero con un remate letal, el escurridizo delantero se las ingeniaba para convertir de todas las formas y desde todos los lugares. Así, alcanzó la cifra de 690 anotaciones, aunque los números difieren según las fuentes. Él mismo declara que superó los 1000.

Romário se mantiene como el cuarto anotador histórico de Brasil, con 56 conquistas.

7. Roberto Carlos (1989-2015)

Para muchos, el mejor defensor lateral por la izquierda de la historia de este deporte. Roberto Carlos Da Silva vistió la verdeamarela en 127 ocasiones, por lo que solo está debajo de Cafú y Neymar. Obtuvo el Mundial 2002 y el subcampeonato en Francia 1998.

Además, brilló durante una década en el Real Madrid, donde alzó tres Champions League. También en el Inter de Italia, en el Fenerbahçe turco y en el Corinthians brasileño. Su velocidad para pasar al ataque, sumada a una pierna zurda con una potencia inédita, llevaron a este futbolista a un lugar privilegiado en las páginas futboleras.

Sus tiros libres lejanos con una comba exagerada serán difíciles de igualar. Elegir un instante en una trayectoria tan larga y exitosa deja sabor a poco, pero nadie que disfrute este deporte puede dejar de ver su gol ante Francia en 1997.

8. Zico (1971-1994)

Arthur Antunes Coimbra es un exmediapunta de vistoso juego, con capacidad como asistidor, pateador de tiros libres y regateador. Más allá de que no era un delantero centro, se forjó como leyenda por su capacidad goleadora. Incluso se ganó el mote de «el Pelé blanco».

Sus mayores éxitos en clubes fueron en el Flamengo, donde en 1981 levantó la Copa Libertadores —como goleador del certamen— y la Intercontinental. Con la canarinha le tocó un periodo de transición entre ambas eras doradas.

A pesar de no levantar trofeos, participó en tres mundiales y cumplió una excelente actuación en España 1982. Firmó cuatro tantos e integró el equipo ideal del certamen. Zico defendió la verdeamarela en 71 ocasiones y convirtió 48 veces, por lo que se mantiene como el quinto goleador histórico de la selección.

9. Rivaldo (1989-2015)

Vítor Borba Ferreira Gomes tuvo una extensa carrera que vio sus puntos más altos a finales de la década de 1990 y principios del 2000. Después de campeonar en el Brasileirao con Palmeiras, el mediocampista ofensivo —para algunos delantero— brilló con las camisetas de La Coruña, Barcelona y Milan.

Obtuvo un bicampeonato de liga española con el equipo blaugrana y se dio el gusto de levantar la Champions League con la escuadra italiana en la edición 2002-03. Ahora bien, nada se compara con sus actuaciones en los mundiales 1998 y 2002. En el primero marcó tres tantos y llegó a la final; en el segundo, forjó el inolvidable tridente campeón, junto a Ronaldo y Ronaldinho.

Rivaldo recibió el Balón de Oro en 1999, año donde también levantó la Copa América con Brasil y se erigió como el mejor jugador y goleador del certamen.

Rivaldo es una leyenda en números: firmó 408 tantos en 951 partidos de clubes, y otros 38 en las 86 ocasiones que vistió la verdeamarela. De este modo, se mantiene como el séptimo goleador histórico de la selección. Aun así, las cifras no alcanzan a reflejar el placer de contemplar su despliegue de recursos en el césped.

Zurdo, alto, potente, fino, habilidoso y amante de las piruetas. Cuando parecía acorralado, Rivaldo ejecutaba un movimiento impredecible que dejaba congelados a los presentes. Entre tantos títulos y honores, destacar una sola jugada siempre es injusto, pero la chilena frente a Valencia, en el último suspiro de la temporada española 2000-01 —que sirvió para clasificar a la Champions—, es un buen reflejo de la calidad de este inolvidable futbolista.

10. Neymar (2009-actualidad)

Si de emblemas de la última década se habla, Ney es el más representativo. Un comienzo arrollador en el Santos lo llevó a la cima de América y a fichar por el Barcelona de Lionel Messi. Allí conformó un dúo —luego trío junto al uruguayo Luis Suárez— que dominó el mundo del fútbol por años.

Ganó todo con el club catalán, luego, viajó al PSG francés y, más tarde, al club saudí Al Hilal. Con la canarinha levantó la Copa Confederaciones, en 2013, y el oro olímpico, en 2016. Las diversas lesiones no le permitieron ser trascendental en los mundiales que disputó.

A pesar de las lesiones, Neymar ostenta el récord de mayor goleador en la historia de la selección, con 79 tantos en 128 cotejos.

En matería de goles, Ney es el único que supera a Pelé en la selección brasileña. Su destreza, dribleo, velocidad y definición lo erigen como el último crack brasileño hasta la fecha.



11. Sócrates (1974-1989)

Apodado «El Doctor», por su título en Medicina, Sócrates fue un centrocampista elegante, de gran precisión, buena pegada y destacada visión para crear juego. Por todo esto, es recordado como uno de los mejores futbolistas brasileños de la década de 1980, a pesar de la escasez de títulos.

Fue capitán de su selección en el Mundial de 1982, en un recordado equipo junto a Zico, Paulo Falcão y otros talentosos jugadores. No obstante, cayó ante el campeón, Italia, en segunda fase. Sócrates desarrolló su carrera en el fútbol local, con un breve paso por la Fiorentina italiana, y acumuló 22 goles en 60 presencias con la verdeamarela.

12. Djalma Santos (1945-1972)

Las generaciones actuales tal vez crean que los laterales brasileños nacieron con Cafú. Sin embargo, los futbolistas prolíficos en esta posición vienen de una larga data. Quizás el primero por el sector derecho haya sido Djalma Santos. Fue campeón del mundo en 1958 y 1962, donde su velocidad, capacidad de ataque y firmeza defensiva revolucionaron el puesto.

Participó en otros dos mundiales (1954 y 1966), y conquistó tres brasileiraos con el Palmeiras. Santos integró el equipo ideal de tres copas del mundo diferentes, hito que solo comparte con Franz Beckenbauer y Philipp Lahm.

13. Jairzinho (1961-1984)

Los especialistas señalan dos equipos de fútbol como los mejores de todos los tiempos: el de Países Bajos de 1974 y el de Brasil de 1970. Jairzinho, nacido en Rio de Janeiro, fue una de las figuras principales de aquel mundial celebrado en México. Aportó la explosividad, el dribleo y los goles: marcó en todos los partidos, llegando a un total de siete.

Además de ese torneo cumbre, disputó otros dos mundiales con la canarinha. En total, acumuló 35 anotaciones con la selección, razón por la que comparte el séptimo lugar como goleador histórico con Rivaldo y Ronaldinho. Se consagró en numerosas ocasiones con el Botafogo y alzó la Copa Libertadores de 1976 con el Cruzeiro.

Jair Ventura Filho fue nada menos que el sucesor de Garrincha, acaso máximo ídolo brasileño luego de Pelé. Y lo hizo sin pesar. De hecho, se ganó el apodo de «huracán» por su explosión y potencia en los metros finales.

14. Rivelino (1965-1981)

Otro atacante de ese Brasil antológico fue Roberto Rivelino. Dueño de una zurda admirable por su fuerza y curva, anotó tres goles en el Mundial 1970 y otros tres en el 74. Su estilo de juego fue innovador, con regates impredecibles y una habilidad que despertó la admiración del propio Diego Maradona, quien lo catalogó como referente.

Jugó la mayor parte de su carrera en el Corinthians y en el Fluminense de Brasil. En este último equipo formuló una jugada inolvidable, considerada la primera «elástica». Fue en 1975 frente al Vasco da Gama por el Campeonato Carioca y sirvió para marcar un tanto de lujo. También sirvió como inspiración para el estilo de Ronaldinho.

15. Zizinho (1939-1962)

Retrocedemos hacia la era donde jugaron las inspiraciones de los primeros campeones. Thomaz Soares da Silva, o Zizinho, fue nada menos que el ídolo de Pelé. Este mediocampista y puntero derecho con gran capacidad goleadora vistió la verdeamarela en 53 ocasiones y marcó 30 veces, dos de ellas en el Mundial 1950.

Aquella ocasión auguraba el primer trofeo mundialista para Brasil, celebrado en su tierra, pero fue arrebatado por Uruguay en el icónico Maracanazo.

El Mundial 1950 dejó una marca tan oscura como imborrable en los aficionados locales, aun así, la canarinha ostentaba un verdadero equipazo.

Zizinho era una de las figuras, quien ya venía de obtener el Campeonato Sudamericano de 1949. Es el máximo goleador histórico de esta competición, junto al argentino Norberto «Tucho» Méndez. A nivel clubes, tuvo sus mayores éxitos en el Flamengo, donde ganó cuatro torneos cariocas.

16. Ademir (1939-1957)

Ademir Marques de Menezes acompañaba a Zizinho en el frente de ataque de aquel equipo, que se completaba con Jair. Fue la estrella principal dentro del área, dado que, con sus ocho tantos, se convirtió en el goleador del Mundial 1950.

También venía de campeonar en el certamen sudamericano del año anterior, y obtuvo cinco campeonatos cariocas con diferentes equipos brasileños.

Ademir todavía ostenta el mejor promedio de gol con la selección: 0,82 tantos por partido, producto de sus 32 anotaciones en 39 encuentros.

Al igual que sus compañeros, cargó con el estigma del Maracanazo. Tan a fondo impactó aquella derrota que las autoridades brasileñas del fútbol decidieron no volver a utilizar la camiseta blanca, que hasta ese momento era característica de la selección. Así, nació el uniforme con camiseta amarilla y pantaloneta azul.

17. Carlos Alberto Torres (1963-1982)

Para muchos, el mejor defensor de la historia brasileña y top mundial. Lo tenía todo: habilidades defensivas, proyección como lateral por la derecha, liderazgo, inteligencia, buen pie y hasta gol. Fue el capitán de Brasil durante el Mundial de 1970, equipo que consiguió la tercera estrella para la canarinha y Pelé.

A esta selección se la recuerda como una de las mejores formaciones de todos los tiempos. En la final de ese certamen disputado en México, Carlos Alberto marcó el cuarto gol de la final contra Italia, en una jugada en la que todos los miembros del equipo brasileño tocaron el balón. Además, acompañó al Rey Pelé en su senda triunfal con el Santos y en el New York Cosmos de Estados Unidos.

18. Kaká (2001-2017)

Otro integrante del equipo campeón de 2002, aunque solo disputó un partido, dado que aún se proyectaba como leyenda. Kaká fue un futbolista fino, preciso y con una visión privilegiada dentro del terreno de juego. Brilló por su capacidad como asistir en el mediocampo y por su potente disparo.

Durante la temporada 2006-07, se erigió como el mejor jugador del planeta. Consiguió la Liga de Campeones con el Milan, última para la escuadra italiana hasta la fecha. Fue el goleador del certamen y merecedor del Balón de Oro. Luego, jugó en el real Madrid y se retiró en Orlando City, de Estados Unidos.

19. Nilton Santos (1948-1964)

Si el Cafú de la primera etapa gloriosa de Brasil fue Djalma Santos, el Roberto Carlos fue Nilton. El también bicampeón mundial disputó 86 partidos con la selección brasileña, en la que llevaba a cabo un recorrido desde el extremo izquierdo como lateral y atacante.

Los especialistas sostienen que Nilton Santos fue un adelantado a su época y que, junto a Djalma en el otro extremo, inauguraron el concepto de laterales atacantes.

Además, conquistó la Copa América 1949, antes llamado Campeonato Sudamericano de Selecciones. Ganó todo con el Botafogo, único club de su carrera, por lo que ingresa en la categoría de futbolistas que solo jugaron en un equipo. Por tal motivo, su fecha de nacimiento —16 de mayo— es el día del club.

20. Arthur Friedenreich (1909-1935)

Si existe un futbolista pionero de la magia brasileña en el césped, ese fue Arthur Friedenreich. Hijo de un inmigrante alemán y una lavandera afrodescendiente, este delantero llevó a la selección a sus primeros éxitos. El conteo de goles oficiales es dificultoso por la falta de registros, pero algunos dicen que alcanzó 1329 tantos. Tal cifra lo convertiría en el máximo goleador de la historia de este deporte.

Friedenreich anotó el tanto decisivo con el que Brasil venció a Uruguay en la final del Campeonato Sudamericano 1919, que fue el primer título en la historia para la verdeamarela.

Además, integró numerosos equipos durante la todavía era amateur, pero los mayores éxitos los consiguió con el Paulistano. Fue goleador del Campeonato Paulista en ocho ocasiones, aunque una lesión lo dejó fuera del Mundial 1930, el primero de la historia.

Escribió de él Eduardo Galeano: «Este mulato de ojos verdes fundó el modo brasileño de jugar. Rompió con los preceptos ingleses: él, o el diablo que se metía en la planta de su pie. Friedenreich llevó al solemne estadio de los blancos la irreverencia de los chavales color café que se divertían disputando una bola de trapos en los suburbios».

21. Bebeto (1982-2002)

La dupla más recordada del Brasil de los años 90 fue Romário-Bebeto, quienes alzaron el cuarto trofeo mundial en Estados Unidos. En aquella edición, José Roberto Gama de Oliveira convirtió tres goles, incluido el que le otorgó la victoria frente al local en octavos de final.

Antes, se había consagrado en la Copa América 1989 como figura y goleador, con seis anotaciones. Aquel fue un título muy importante para Brasil, dado que finalizó una racha de 19 años sin ganar torneos oficiales, tras el Mundial 1970. Además, disputó la copa de 1998, donde integró el frente de ataque con Ronaldo.

A nivel clubes, Bebeto es ídolo del Deportivo La Coruña español. Allí firmó 102 tantos en 154 partidos, y fue el primer pichichi de la historia del club, en 1993. Este hábil delantero, escurridizo, regateador y letal definidor, también brilló con la camiseta del Flamengo y del Vasco da Gama.

22. Domingos Antônio da Guia (1929-1950)

Naturalmente, en el amanecer del fútbol profesional los registros audiovisuales se dificultan. Aun así, Domingos da Guia se conserva en la memoria como el primer gran defensor central de Brasil. Participó en el Mundial de Francia 1938, donde su equipo quedó tercero y tuvo la primera actuación destacada en certámenes globales.

Da Guia quedó seleccionado en el equipo ideal de aquel torneo. Los registros lo definen como un defensa ágil, calculador e inteligente, con gran fortaleza física. A nivel clubes, conquistó cuatro campeonatos cariocas con el Vasco da Gama y el Flamengo, en una época donde aún no existían los torneos nacionales brasileños.

Ademir da Guia, hijo de Domingo, fue un centrocampista exquisito y el jugador con más presencias en el Palmeiras. Para muchos, un futbolista subvalorado en la historia del país.

23. Mário Zagallo (1948-1965)

Zagallo completó el cuarteto atacante del bicampeonato brasileño. Ocupó el extremo izquierdo con velocidad y capacidad goleadora. Hasta convirtió en la final de 1958 ante el local. También marcó un tanto en el certamen celebrado en Chile, y fue titular en los 12 partidos que llevaron a la canarinha a la gloria.

Además, cabe destacar su carrera como director técnico. Zagallo fue el entrenador de Brasil durante el Mundial de 1970, por lo que se convirtió en la primera persona en levantar la copa como jugador y DT. Hasta el momento, solo el alemán Franz Beckenbauer y el francés Didier Deschamps igualaron ese logro.

En 1994, Zagallo fue asistente del técnico Carlos Alberto Parreira y, en 2002, Luis Felipe Scolari lo llevó para dar charlas motivacionales al equipo. Así las cosas, su figura estuvo vinculada en todos los títulos mundiales de Brasil.

24. Gilmar (1950-1969)

El único portero de este listado es quizás el preferido de los brasileños. Gylmar dos Santos Neves no solo defendió el arco del equipo de Pelé en los mundiales de Suecia y Chile, sino también el del club Santos.

Con esta escuadra conquistó las copas libertadores e intercontinentales de 1962 y 1963. La Federación Internacional de Historia y Estadística de Fútbol (IFFHS) lo eligió como el mejor portero brasileño del siglo XX.

25. Thiago Silva (2002-actualidad)

Así como Neymar es el símbolo del ataque verdeamarelo en la última década, Thiago Silva es el emblema de la defensa. Capitán, líder y muralla, participó en cuatro mundiales, de 2010 a 2022, aunque en el primero no jugó ningún partido. En la semifinal de 2014, cuando la canarinha cayó ante Alemania por 7 a 1, Silva no pudo presentarse por acumulación de amarillas. Ausencia notoria junto a la de Ney.

No obstante, el futbolista de pasos destacados por el Fluminense, el Milan, el PSG y el Chelsea, conquistó la Copa Confederaciones y la Copa América. Además, es el quinto futbolista con más partidos en la selección: acumula 113, en los que anotó en siete ocasiones.

Menciones honoríficas

En el país del fútbol, nunca alcanzan las páginas para recordar a todos los grandes. Sin embargo, vale mencionar algunos jugadores más que se quedaron afuera de este listado y fueron importantes en la construcción de la gloria verdeamarela:

  • Marcos. Portero titular en el equipo campeón del Mundial 2002.
  • Rogério Ceni. El arquero con más goles en la historia del fútbol: 129.
  • Tostão. Otro invaluable del frente de ataque en la selección campeona de 1970.
  • Mauro Silva. Fue trascendental en el mediocampo del Brasil campeón en 1994.
  • Dida. Uno de los mejores porteros de los últimos 20 años. Defendió 91 veces la camiseta de Brasil.
  • Vavá. Primer futbolista de la historia en convertir en dos finales mundiales consecutivas (1958 y 1962).
  • Lúcio. Líder de la defensa canarinha en el campeonato mundial 2002 y en las copas confederaciones 2005 y 2009.
  • Didí. Estandarte de la mitad de cancha en el bicampeonato 58-62. En Suecia fue elegido mejor jugador del certamen.
  • Gilberto Silva. Un volante de potencia y categoría, equilibrio del mediocampo en aquel brillante campeón del 2002.
  • Casemiro. Muchos consideran a este volante de gran destreza técnica como uno de los mejores en las últimas décadas.
  • Gérson. Prolífico mediocampista de grandes pases y pegada, conocido como «zurdo de oro». Campeón del Mundial 1970.
  • Leônidas da Silva. Los especialistas lo erigen como el primer ídolo futbolístico de Brasil. Fue goleador del Mundial 1938.
  • Dunga. Antes de ser entrenador, participó en tres mundiales con la selección. Fue campeón en 1994 y en las copas América 1989 y 1997.
  • Dani Alves. Cuarto jugador con más presencias en la historia de la selección, con 126 y ocho tantos. Ganó dos copas confederaciones, la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Tokio y dos Copas América, además de tres Champions League con el Barcelona. Después de Lionel Messi, es el jugador con más títulos en la historia del fútbol.


El futuro siempre tendrá a Brasil como protagonista

Por más que ya sean más de dos décadas desde la última victoria mundialista, Brasil siempre es candidato a ganar un trofeo. El recorrido de su inigualable historia lo afirma, pero también un presente con nuevas figuras en crecimiento. Solo el tiempo dirá si jugadores como Vinícius Júnior, Rodrygo o Endrick, ingresan en estas páginas de oro verdeamarelo.


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