3 errores que arruinan una dieta
Mucha gente trata de cambiar su modo de alimentarse para perder peso, estar más saludable o simplemente incrementar el rendimiento físico. Sin embargo, la mayor parte de las personas que inician este proceso sin el asesoramiento adecuado cometen una serie de errores que arruinan una dieta. Es importante que los conozcas, para así evitarlos.
Antes de nada, te recomendaremos que acudas a un profesional de la nutrición si lo que quieres es cambiar el modo de alimentación. En internet circulan un montón de «dietas milagro» y de consejos dietéticos que no cuentan con evidencia científica detrás, y que podrían poner en riesgo el estado de salud. Desde luego, es fundamental evitarlos.
Errores que arruinan una dieta
A continuación, te vamos a mostrar cuáles son los principales errores que debes evitar a la hora de hacer dieta para garantizar el éxito. Recuerda que el objetivo no es que los resultados se noten al cabo de la primera semana, sino que el tratamiento sea capaz de generar adherencia a medio plazo.
Centrarse demasiado en el número de comidas
Hasta hace pocos años, la recomendación general era realizar al menos 5 comidas a lo largo del día. Para algunas personas, esto puede resultar muy acertado. Sin embargo, para otras no será oportuno, ya que tienden a consumir gran cantidad de alimento en cada una de ellas.
En la actualidad, un estudio publicado en Ageing Research Reviews ha demostrado que los protocolos de ayuno intermitente que reducen el número de ingestas resultan muy adecuados.
De esto modo, más que preocuparte por cuántas veces comes al día, deberías centrarte en elegir alimentos de calidad y en confeccionar menús saludables basados en productos frescos. A partir de aquí, se pueden plantear estrategias con mayor o menor número de ingestas, según las preferencias individuales.
Restringes demasiado las grasas
La grasa es el nutriente que más energía aporta por gramo, de eso no hay duda. Ahora bien, esto no quiere decir que sea necesaria su restricción para perder peso. Al menos no de manera excesiva. De hecho, un mayor contenido en grasa de la dieta se asocia con un mejor estado de salud a medio plazo.
Esto se debe fundamentalmente a que la grasa cuentan con muchas funciones diversas dentro de la fisiología humana. Además, permite el transporte, la absorción y el almacenamiento de las vitaminas liposolubles, necesarias para modular la inflamación y para evitar el desarrollo de patologías complejas.
Con todo esto, será determinante aportar grasas de calidad. Lo mejor es optar siempre por las de tipo cis, bien sean saturadas (alimentos de origen animal) o insaturadas (alimentos de origen vegetal y pescado). Sin embargo, es aconsejable también promocionar el aporte de las últimas sobre las primeras.
Asimismo, habrá que limitar lo máximo posible la ingesta de grasas trans en la dieta. Estas son capaces de incrementar el riesgo de enfermar, según un estudio publicado en Diabetes & Metabolic Syndrome .
Olvida los refrescos y el alcohol
Mucha gente pone en marcha un plan para perder peso y controla de manera muy estricta lo que come, pero no lo que bebe. De poco servirá limitar los procesados en la dieta si las comidas se acompañan con refrescos azucarados o con bebidas alcohólicas. Ambos elementos resultan especialmente nocivos para la salud; tampoco los zumos son una buena idea.
A la hora de garantizar un buen estado de hidratación, la herramienta principal ha de ser el agua mineral fresca. Se puede valorar el consumo puntual de agua con gas, pero tampoco conviene abusar de esta bebida, ya que podría generar molestias intestinales. Incluso la leche entera resulta una buena opción, sobre todo en el contexto de los deportistas.
Evita los principales errores que arruinan una dieta
Como has visto, son varios los errores que arruinan una dieta que se suelen cometer. Estos limitan los resultados generados por un cambio de hábitos, lo que puede conducir a la frustración y a la ansiedad y poner en riesgo la adherencia del tratamiento dietético.
No olvides que, a la hora de establecer un planteamiento de alimentación, además de tomar el camino acertado en cuanto a decisiones dietéticas, será necesario asegurar la adaptación a nivel individual. Es posible que haya que hacer ciertas modificaciones en cada caso, dependiendo de los horarios o gustos de la persona, para conseguir así la máxima comodidad e incrementar las posibilidades de éxito.
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- Mattson, M. P., Longo, V. D., & Harvie, M. (2017). Impact of intermittent fasting on health and disease processes. Ageing Research Reviews, 39, 46–58. https://doi.org/10.1016/j.arr.2016.10.005
- Islam, M. A., Amin, M. N., Siddiqui, S. A., Hossain, M. P., Sultana, F., & Kabir, M. R. (2019). Trans fatty acids and lipid profile: A serious risk factor to cardiovascular disease, cancer and diabetes. Diabetes & Metabolic Syndrome, 13(2), 1643–1647. https://doi.org/10.1016/j.dsx.2019.03.033