¿Se debería controlar la publicidad de comida basura?
Si pensamos que somos capaces de controlar nuestros institos más primarios en relación a la alimentación, y que podemos luchar ante nuestros hábitos, deseos y decisiones cuando vemos un anuncio, quizás nos estamos equivocando. Por eso, la pregunta es clara: ¿se debería controlar la publicidad de comida basura? A continuación, te lo contamos.
Estadísticas en relación a la obesidad y la publicidad de comida basura
El sobrepeso afecta en España a un tercio de los menores de 12 años, según datos de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria). Además, en los últimos tiempos, se han disparado los datos de obesidad infantil, y en parte, los anuncios nos incitan a comer alimentos ricos en azúcares y grasas no saludables con la publicidad que proporcionan, de ahí la importancia de controlar la publicidad de comida basura.
En 2013, se prohibió en México emitir anuncios de comida basura en horario infantil, ¿por qué no aplicamos lo mismo en nuestro país y nos preocupamos un poco más de los niños, que son el futuro?
Posiblemente, algo tenga que ver el dinero que mueve emitir estos anuncios en los medios de comunicación; ya que solo en estados Unidos, como bien sostiene el periodista Sandro Pozzi, los anunciantes gastan más de 2.000 millones de dólares el año pasado promocionando comida y bebida para los más pequeños.
Productos de comida basura
La mayoría de estos productos no saludables los podemos juntar en grupos, estos son:
- Cereales azucarados: típicos en desayunos infantiles, por ejemplo los típicos copos de arroz con miel.
- Bebidas azucaradas: como la Coca-Cola, fanta de naranja…
- Aperitivos dulces: chocolates, bollos…
- Aperitivos salados: como las patatas fritas de bolsa.
- Comida rápida: las típicas hamburguesas, nuggets…
Sería una buena opción cambiar esos aperitivos de chocolate de media mañana por una pieza de fruta. Además, debemos intentar comer siempre con agua y no dejar que nuestros pequeños consuman bebidas azucaradas de continuo.
¿Cómo controlar la publicidad de la comida basura?
Controlar la publicidad de comida basura debería ser obligatorio; ya que toda esta publicidad de alimentos y bebidas con alto contenido de azúcar o sal poco saludables tienen un impacto inmediato y significativo sobre los niños y hacen que lleven dietas dañinas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) denuncia que, si se han implantado restricciones en la publicidad de alcohol y tabaco en los medios de comunicación de los estados miembro de la Unión Europea, por qué muchos países no han establecido todavía límites en la publicidad alimentaria para los niños.
Los menores españoles de entre 3 y 12 años son los segundos que más tiempo pasan frente a la televisión en toda Europa con una media de dos horas y media, según un artículo publicado por la Revista Telos. Y durante este tiempo, la mayoría de los anuncios publicitarios que reciben son de productos alimenticios.
Cada menor puede llegar a ver 54 anuncios de televisión a lo largo del día y la mayoría (el 71,2 %) son, precisamente, de alimentos y bebidas altos en calorías y azúcares. Además, según un estudio desarrollado en 2013, se analizaron 133 spots de alimentos dirigidos a niños emitidos en España en el año 2006, donde la mayoría de estos ofrecían premios y juguetes en el horario de comida. Por eso, se hace indispensable controlar los factores de marketing y de horario.
Dónde comprar comida basura
A parte de controlar la publicidad de comida basura, deberíamos tener en cuenta dónde poder comprarla. A día de hoy, es muy fácil conseguirla.
- En supermercados o tiendas convencionales: no solo puedes conseguirlos fácilmente, sino que suelen tener suculentas promociones, con envases llamativos e incluso que aparezcan dibujos o personajes que a los niños del gusten.
- Medios de transporte: muchos autobuses llevan publicidad pegada en la carrocería, pero no hablamos solo de eso. Muchas veces en las paradas de metro o incluso dentro de algún tren encuentras máquinas expendedoras donde tienes muchos snacks y comida basura para consumir.
- Escuelas: muchas escuelas y colegios tienen cafetería, y allí es donde proporcionan bolsas de patatas fritas, chocolates, o productos ricos en azúcares.
Controlar la publicidad de la comida basura debería ser un deber por la salud
Visto que es tan fácil consumir cualquier producto poco saludable, debemos intentar controlar la publicidad de comida basura y cambiarla por frutas o aperitivos saludables, ya que esto haría que se redujera el consumo de esta comida y, con ello, evitar enfermedades el día de mañana.
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