Deportista sedentario: ¿cómo dejar de serlo?

Mucha gente tiene la creencia errónea de que hacer solo una hora de ejercicio al día es llevar un estilo de vida saludable. Descubre si eres un deportista sedentario.
Deportista sedentario: ¿cómo dejar de serlo?
Gloria Redondo Rincon

Revisado y aprobado por la psicóloga deportiva Gloria Redondo Rincon.

Última actualización: 26 mayo, 2023

Hacer ejercicio físico es sinónimo de salud, pero no siempre es equivalente a llevar un estilo de vida saludable. Aquel que solo va entrenar al gimnasio, pero el resto del día está inactivo bien podría encasillarse como un deportista sedentario y cómo dejar de serlo es más sencillo de lo que crees. Prestá a tención a los tips que te daremos y aprovecha todos los beneficios para tu organismo.

Es innegable que la actividad física regular es uno de los hábitos más sanos que existen. Aún así, no todo vale, y es que para que sea eficaz tiene que hacerse con una intensidad y duración determinados. Esto no significa que haya que acabar exhausto en cada entrenamiento. Según la Organización Mundial de la Salud es suficiente con hacer entre 150 y 300 minutos de actividad moderada a la semana.

Seguramente muchas personas se identifican con la definición de deportista sedentario, por suerte dejar de serlo es fácil si se hacen cambios en las rutinas cotidianas. A continuación veremos cómo conseguirlo.

Convierte tus desplazamientos en tiempos de actividad

A lo largo del día las personas empleamos gran parte del tiempo en los desplazamientos. Ya sea para llegar al trabajo, escuela o simplemente ir a entrenar. En todos se pierde tiempo de traslado que puede ser aprovechado para aumentar los minutos de actividad.

Una sencilla manera de dejar de ser un deportista sedentario es cambiar la forma de desplazamientos. La mayoría de las personas prefieren moverse de una forma pasiva, sobre todo utilizando el coche. Sin embargo, realizar los mismos trayectos pero caminando o en bicicleta aporta muchos beneficios para tu salud siendo una manera simple de romper con el sedentarismo.

Estos no solo hacen referencia al físico y al trabajo sobre el sistema cardiovascular. Además, el ejercicio aeróbico produce un aumento de la oxigenación cerebral que se traduce en un mejor rendimiento cognitivo.

Aprovecha las ventajas del ejercicio con otras personas

Cultivar la vida social es un aspecto fundamental para tener una vida saludable. Las relaciones sociales sirven tanto para aumentar las emociones positivas como para aliviar las tensiones propias del día a día.

Hay muchas formas de hacer planes con los amigos. Por un lado, se pueden idear actividades más tradicionales como salir a tomar algo o ir a comer. Por otro lado, también se puede aprovechar para combinar vida social con actividad física.

Los planes sociales que se combinan con ejercicio físico tienen muchos más beneficios. Lo único que se requiere es ser creativo y encontrar una actividad que guste a todos. Algunos grupos de amigos disfrutan jugando al fútbol los domingos, otros yendo a patinar al parque. Con toda probabilidad habrá un actividad que resulte apetecible para todos.

Regula la intensidad de los entrenamientos

Uno de las razones que explican por qué existen los deportistas sedentarios reside en una incorrecta programación de la intensidad de los entrenamientos. Muchas personas se esfuerzan demasiado en darlo todo cada entrenamiento, tanto es así que al día siguiente están agotados y necesitan unos días para recuperarse.

Incrementar la intensidad de los entrenamientos es una estrategia necesaria para seguir creciendo, pero si se hace sin control al final resta más que sumar. De hecho, la intensidad desmesurada está estrechamente relacionada con el síndrome de sobreentrenamiento que te alejará durante algunos días y aumenta las probabilidades de lesiones.

En relación con el síndrome de sobreentrenamiento, un estudio publicado en la revista digital “Lecturas: Educación Física y Deportes” afirma que las principales causas de esta condición son los entrenamientos intensos interválicos y los incrementos rápidos en la carga.

Dejar de ser un deportista sedentario depende de ti

Puede que hasta ahora hayas creído que con ir a entrenar durante una hora al día es suficiente para mantenerte sano y en buena forma. En realidad, esto es engañoso, pues la salud depende del conjunto de acciones que se hagan a lo largo del día. Un claro ejemplo de esto ocurre con aquellos deportistas que luego de entrenar consumen hidratos de carbono en exceso.

Ahora que se entiende qué es un deportista sedentario, el siguiente paso es introducir cambios en el estilo de vida para dejar de serlo. Recuerda que la vida es una carrera de fondo. Por tanto, valen más los pequeños esfuerzos realizados cada día que los apretones en momentos puntuales.


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