3 tips para afrontar cualquier resultado malo en el deporte
Tener en mente estos tips para afrontar cualquier resultado malo en el deporte es una gran ayuda para superar cualquier bache. En la carrera de cualquier deportista hay momentos buenos y malos en partes iguales. El asunto es que los negativos se tienden a tapar, como si no existiesen, provocando que sea más difícil poder superarlos.
Cada persona tiene su manera particular de afrontar los malos resultados. Algunas prefieren hablarlo, otras distraerse, y otras hacer un ejercicio de autocrítica para hacer cambios en el entrenamiento. En cualquiera de los casos lo que existe en común es un reconocimiento de haber tenido un mal resultado y la motivación necesaria para que no vuelva a repetirse. Este paso es el primero, y el más crucial, para después poder tomar acciones más concretas. Con todo esto, a continuación veremos los mejores tips para afrontar cualquier resultado malo en el deporte.
1. Toma una perspectiva más amplia
Es muy habitual que cuando un deportista tiene un mal resultado para que no existe otra cosa en su carrera deportiva. La atención tiene a focalizarse en lo negativo dejando de lado todos los otros resultados. Aunque lo anterior sea una tendencia habitual no quiere decir que sea sana, ya que tender a focalizar la atención en lo negativo hace que sea más difícil poder pasar página.
El ejercicio de pensar de una manera más amplia cuando se tiene un resultado negativo no es fácil. Las emociones negativas inundan la mente y parece que solo existe lo negativo. Por esa razón, es mejor esperar a estar uno más calmado para creer diferente. Aun así, merece la pena abrir la mente y colocar cada acontecimiento como lo que es, un resultado más. La vida sigue, y nunca dejan de aparecer nuevas oportunidades para hacer las cosas de una manera mejor.
2. Rodéate de gente positiva
Hay momentos de la vida que uno no puede afrontarlos solo y necesita la compañía de los demás. Esto mucha gente lo ve como una supuesta debilidad, pero la verdad es que es todo lo contrario. Hace falta mucho valor para reconocer que una situación le está sobrepasando a uno y que necesita el consejo de los otros.
El rodearse de gente en momentos malos no solo sirve como una forma de desahogarse o no sentirse solo. También, si son personas positivas se puede producir el llamado “efecto contagio”, es decir que uno se acaba impregnando de las emociones positivas que los demás desprenden. A este respecto, un estudio de la Universidad Autónoma de Chile afirma que en los deportes colectivos el contagio emocional positivo es una de las principales estrategias que emplea el grupo para afrontar los malos resultados.
3. Reevalúa y proponte nuevas metas
En la mayoría de las ocasiones tener un mal resultado no es la causa, sino la consecuencia de que algo en la preparación ha fallado. Quedarse solo en el mal resultado hace que el deportista no pueda seguir avanzando y corrigiendo aquellas cosas que han llevado a tener un mal resultado. Por tanto, después de un mal resultado tiene que venir un proceso de reflexión y revaluación de lo que ha sucedido para seguir creciendo.
La clave está en cuándo se hace el proceso anterior. Justo después de tener un mal resultado no es lo idóneo, pues en ese momento el corazón está muy caliente y no se puede pensar con claridad. Lo óptimo es dejar un par de días para que todas las sensaciones se calmen, y una vez uno esté tranquilo poder examinar con actitud científica.
En este sentido es interesante la relación que tiene la autocrítica con otros factores relacionados con la personalidad. Un artículo de la Universidad de Murcia encontró una relación positiva entre autocrítica y apertura mental, y esto se manifiesta en comportamientos como: buscar experiencias nuevas; ser más creativos; romper con la rutina y los convencionalismos; y tener una actitud curiosa orientada al aprendizaje.
Trabaja tu mente para afrontar cualquier resultado negativo
Los resultados negativos muchas veces son inevitables, pero lo que sí está bajo control de la persona es poder afrontar esos momentos. Esto quiere decir que los esfuerzos no deberían ir solo dirigidos a evitar los malos momentos, sino también a qué hacer cuando estos ocurren. Y lo que es más importante qué lección de aprendizaje se puede sacar de ellos.
Esperamos que estos tips para afrontar un resultado malo en el deporte te sean de utilidad en algún punto de tu carrera. Al fin y al cabo se trata de construir una actitud positiva y humilde capaz no solo de aceptar los errores, sino también aprender algo de ellos para convertirse en un mejor deportista.
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