¿Cuál es el mejor ejercicio para la diabetes?
Determinar el mejor ejercicio para la diabetes depende de diversos factores, entre ellos las capacidades físicas de las personas que la padecen. Realizar actividad física constantemente es una de las principales recomendaciones ligadas a la vida saludable. Por medio de este tipo de prácticas es posible construir hábitos sanos y por ello no se debe pasar por alto.
Sin embargo, la actividad física no se debe llevar a cabo únicamente a modo preventivo. En caso de que padezcas alguna enfermedad, es preciso moverte de forma constante y esto también aplica para la diabetes. Con base en lo anterior, te enseñaremos cuál es el mejor ejercicio para tratar esta patología y cómo debes llevarlo a cabo. ¿Estás preparado?
¿Qué es la diabetes?
Antes de entrar en detalle respecto al ejercicio, debes comprender en qué consiste la diabetes. Esta enfermedad se manifiesta cuando los niveles de glucosa en sangre se salen de control. Normalmente, se conoce como ‘azúcar en la sangre’ o glucemia.
Dicho padecimiento se presenta debido a la insuficiencia de insulina o al comportamiento extraño de la misma, lo que lleva a que la glucosa en la sangre no llegue a las células y no cumpla con su objetivo principal. Incluso, en algunas ocasiones la diabetes requiere del consumo externo de insulina, por lo que las personas se convierten en ‘insulino-dependientes’.
El mejor ejercicio para la diabetes
Aunque la actividad física programada sobresale como una herramienta fundamental en la prevención de patologías como la diabetes, también debe llevarse a cabo con el fin de tratar dicho padecimiento. En ese orden de ideas, los profesionales en salud recomiendan un total de 150 minutos de ejercicio físico semanal para pacientes diabéticos. Dentro de este tiempo estimado lo ideal es realizar distintos tipos de actividades.
Sin embargo, el mejor ejercicio para la diabetes es el cardiovascular. Por lo tanto, la rutina de entrenamiento al tener diabetes debe contar con un especial énfasis en este tipo de actividades. Tal y como se mencionó anteriormente, la intensidad y la vigorosidad de la rutina dependerá de las capacidades de cada persona. En consecuencia, lo ideal es que lo hagas lo más intenso y fuerte posible, sin propasarte de tus límites físicos.
Muchas actividades sobresalen como ejercicio cardiovascular, pero las más recomendadas son montar en bicicleta, nadar y practicar running. Respecto a este tipo de ejercicio, te enseñaremos las alternativas más apropiadas para incluir en tu rutina o para crear una nueva, en caso de que no cuentes con alguna.
Montar en bicicleta
La bicicleta puede ser utilizada como medio de transporte o como ejercicio específico, de ambas maneras aporta diversos beneficios respecto a la diabetes. Uno de los principales aspectos positivos de montar bicicleta de manera regular es el control metabólico, por lo que disminuye los niveles de glucosa en sangre mientras estimula su consumo a nivel muscular.
Practicar natación
La natación cuenta con características similares respecto a la bicicleta a la hora de tratar la diabetes. Esta también favorece el control metabólico y disminuye los niveles de glucosa en sangre. Además, contribuye en la disminución de la resistencia a la insulina. Por lo que la que se encuentra en el organismo puede hacer su trabajo sin problema alguno.
Running
Contrario a lo que suele creerse sobre el running al padecer diabetes, este deporte sí puede practicarse; incluso, se aconseja por parte de los médicos debido a su vigorosidad. De la misma manera que la natación y la bicicleta, contribuye al control metabólico y disminuye los niveles de glucosa en la sangre.
Recomendaciones para hacer ejercicio con diabetes
La actividad física planificada es quizá una de las mejores alternativas para la vida del ser humano sano o enfermo. No vamos a descubrir nada nuevo, pero si debemos hacerte caer en razón de que la diabetes no es un motivo para evitar ejercitarte.
Dicho lo anterior, se hace necesario tomar una serie de precauciones antes, durante y después de llevar a cabo cualquier tipo de ejercicio, especialmente si es de intensidad alta.
Cuidar tus niveles de azúcar en sangre
Los niveles de azúcar en sangre se miden por medio de una prueba que recibe el mismo nombre. Normalmente, la hacen profesionales en la salud encargados del monitoreo antes de cada comida y antes de ir a dormir en la noche.
En los resultados de este tipo de pruebas debes fijarte antes de realizar cualquier tipo de esfuerzo físico, intenso y vigoroso. Si los niveles son bajos, procura consumir algún alimento de fácil descomposición, puede ser un carbohidrato simple, antes de hacer ejercicio. Probablemente, pase lo contrario y tus niveles de glucosa en sangre sean altos. En ese caso toma en cuenta las recomendaciones hechas por tu médico de cabecera con el fin de bajar dichos niveles.
Tener en cuenta tus sensaciones
Durante la práctica del ejercicio te recomendamos vigilar de cerca todas tus sensaciones. Probablemente, percibas mareos, debilidad o dolor de cabeza, en ese caso lo más apropiado es que disminuyas la intensidad y de ser necesario suspendas por completo la actividad.
No ignorar al médico
Tener diabetes debidamente diagnosticada significa que te encuentras bajo observación médica. Por lo que, seguramente tu médico de cabecera te ha hecho una serie de recomendaciones. Lo ideal es seguir al pie de la letra estos consejos, no los pases por alto; mucho menos a la hora de hacer ejercicio.
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