Cruces en polea baja para ejercitar los pectorales

¿Quieres trabajar tus pectorales? Los cruces en polea baja son una buena opción para incluir en tu rutina y lograr este objetivo. Descubre cómo realizarlos en este texto.

Escrito y verificado por el especialista en ciencias de la actividad física y del deporte Andrés Felipe Cardona Lenis.

Última actualización: 20 octubre, 2023

Los cruces en polea baja se caracterizan como un gran ejercicio para trabajar y fortalecer la zona superior del cuerpo, en especial el pecho, los hombros y los brazos.

De seguro, has visto en algún momento esta máquina en la sala fitness, pero aún no te decides a usarla. El primer punto que debes tener en cuenta es que temer a las máquinas o los ejercicios es normal, sobre todo si eres principiante. Sin embargo, debes aprovechar la presencia de instructores para comprender el uso de estos elementos.

Con la intención de introducirte en este ámbito, te ofrecemos este artículo que hace énfasis en los cruces en polea baja para trabajar los pectorales, lo que te permitirá contemplar el uso de esta máquina en tus rutinas. ¡No te lo pierdas!

Cruces en polea baja

Los cruces en polea baja te ofrecen la oportunidad de trabajar la musculatura pectoral, contribuyendo a su desarrollo y fortalecimiento. No obstante, vale aclarar que para que este tipo de ejercicio tenga buenos resultados se aconseja enfocarse en la técnica del mismo.

Por tanto, en principio te aconsejamos que no intentes llevar a cabo ejercicios con cargas externas exageradas, mucho menos en la polea baja, porque las cosas se podrían poner bastante complejas.

¿Cómo hacer los cruces en polea baja?

Antes de asumir la posición inicial, es necesario ajustar la máquina en polea baja, así como determinar la carga externa por medio del peso. Si tienes problemas con ello o no sabes hacerlo, asesórate con algún entrenador del lugar.

Luego, ponte de pie con las piernas al ancho de los hombros y da un paso adelante para generar mayor equilibrio. Extiende los brazos a cada lado y toma los extremos de las poleas con un agarre neutro —palmas de las manos mirando al torso—.

Lleva ambos brazos hacia adelante con las palmas prácticamente enfrentadas entre sí. Mientras tanto, inclina el torso de manera ligera hacia adelante y evita que los brazos queden extendidos por completo.

Procura realizar una breve flexión a la altura del codo para disminuir la tensión en las estructuras del músculo y el tendón. Dicho movimiento debe realizarse a la altura del mentón, aunque existen variantes en cuanto a la elevación de los brazos.

Por último, regresa ambos brazos hacia abajo junto con las poleas hasta alcanzar la posición inicial. Empieza la próxima repetición de manera armoniosa y ejecuta el número de repeticiones establecido en la rutina.

Consejos para los cruces en polea baja

Aunque la ejecución de la técnica de los cruces en polea baja no parece tan compleja, no debes confiarte. Incluso, esta máquina puede llegar a ser más difícil de manejar de lo que aparenta. En ese orden de ideas, se recomienda tener en cuenta algunos consejos a la hora de utilizarla.

Mantener la posición fija

El objetivo primordial es que el torso mantenga una posición fija y estable durante la ejecución del movimiento. Este debe permanecer erguido, inclinado ligeramente hacia adelante y alineado con la cabeza.

Si el movimiento es acompañado por el torso, es bastante probable que los músculos no tengan el estímulo adecuado.

Mover desde la articulación del hombro

Aunque los brazos son los encargados de movilizar la polea, el movimiento debe realizarse desde la articulación del hombro.

Al implementar el esfuerzo desde esta zona, el estímulo sobre los músculos pectorales, deltoides y bíceps braquial es mucho más adecuado. No olvides que el principal objetivo de los cruces en polea baja es desarrollar esta zona muscular.

Evitar los movimientos bruscos

Uno de los principales consejos dentro del mundo del entrenamiento se centra en evitar los movimientos bruscos al ejecutar el ejercicio. Este tipo de movimientos aumentan la probabilidad de lesión, así como la aparición de dolencias en diversas zonas del organismo.

Por otra parte, procura no confundir un movimiento brusco con uno explosivo. En general, la explosividad implica fuerza, velocidad y coordinación, mientras que la brusquedad solo se centra en carencia de técnica.

En ese orden de ideas, procura ejecutar movimientos armoniosos, controlados y con buena técnica.

Aprovecha al máximo los cruces en polea baja

Recuerda buscar asesoría si la consideras necesaria, además de no dejarte llevar por la vergüenza y aprender de manera paulatina. La paciencia es un pilar fundamental en la vida, así como en el entrenamiento.

Asimismo, ten en cuenta que los cruces en polea baja son una buena alternativa para fortalecer los pectorales, siempre y cuando te fijes en el paso a paso descrito en esta lectura.

Por último, y no menos importante, no olvides que la polea ofrece otras variantes para ejercitarte. En consecuencia, es ideal que consultes con el entrenador a cargo para que conozcas su funcionamiento poco a poco. Sin duda, esto te permitirá explorar nuevas formas de ejercitarte.