El metabolismo energético, ¿qué significa?
Cuando nos adentramos en el mundo de la dietética y la nutrición, comenzamos a ver conceptos como el de metabolismo. En muchas ocasiones, estos conceptos rondan la cabeza de los deportistas como ideas ambiguas que no llegan a comprenderse realmente. En este artículo, profundizaremos de forma didáctica en el concepto de metabolismo energético.
¿Qué es el metabolismo energético?
Debemos entender que el cuerpo humano no solo ejerce funciones mecánicas como el movimiento. Existen una gran cantidad de procesos que consumen energía, como la regulación de la temperatura corporal, la digestión de los alimentos o la secreción hormonal.
Esto se hace aún más patente a nivel de la célula, ya que toda célula del organismo, para mantenerse con vida, debe recibir un aporte adecuado de energía y oxígeno.
La propia célula recibe los nutrientes y los utiliza en procesos complejos como la glucólisis o el ciclo de Krebs, con lo que obtiene energía. Además, después de cierta acción, la célula sufre un desgaste, por lo que necesitará reparar su maquinaria celular para funcionar correctamente.
En el párrafo anterior, hemos simplificado los conceptos de anabolismo y catabolismo, que son los dos procesos fundamentales del metabolismo. Podemos definir al metabolismo como el conjunto de reacciones bioquímicas y fisiológicas que ocurren a nivel microscópico y macroscópico, cuyo objetivo es mantener la integridad del organismo y permitirle mantenerse con vida. Veamos sus dos vertientes con mayor profundidad.
Catabolismo
El catabolismo es el proceso mediante el que las células obtienen energía a partir de grandes compuestos que utilizan como combustible. El ejemplo clásico es el de la glucosa —o azúcar—, aunque la célula también puede utilizar la grasa o las proteínas como fuente energética.
En este proceso, se rompen moléculas grandes en otras más pequeñas y se libera energía durante el proceso. Esta energía es imprescindible, pues se utilizará para el mantenimiento de las funciones esenciales del cuerpo humano.
Un concepto que se nombra frecuentemente también en la nutrición deportiva es el de tasa metabólica basal. Este hace referencia a la cantidad de calorías que necesita el cuerpo para realizar estas funciones esenciales, sin contar el gasto calórico procedente de la actividad física. Estas calorías las obtendrá del catabolismo de los alimentos que ingerimos o de las reservas energéticas como la grasa.
Anabolismo
El anabolismo es el proceso opuesto. En este se sintetizan grandes moléculas a partir de otras más pequeñas, y para ello se necesita energía. Como podremos deducir, el anabolismo es uno de los grandes determinantes de la tasa metabólica basal, ya que es el conjunto de procesos encargados de reparar las estructuras del organismo, como ocurre con el músculo después del ejercicio.
También es el encargado de renovar las células de los tejidos del cuerpo, ya que gracias al anabolismo las células pueden dividirse con más facilidad.
El anabolismo es imprescindible para aumentar la musculatura y mejorar el rendimiento deportivo. De hecho, de este proceso toman su nombre los esteroides anabólicos, ya que su acción se basa en la estimulación del efecto anabólico que tienen hormonas como la testosterona, de la que son derivados estos compuestos.
Balance energético, ¿por qué es tan importante?
Una vez que comprendemos que el organismo es un juego entre anabolismo y catabolismo, es decir, entre procesos que producen energía y procesos que la utilizan, podemos establecer el concepto de balance energético.
El cuerpo humano es una máquina de gastar calorías. Se establece que, de media, un adulto consume unas 2000 calorías al día, incluyendo la tasa metabólica basal y la actividad física. En deportistas con un organismo más adaptado al gasto energético, podemos encontrar atletas que gastan 3000 o 4000 calorías diarias.
Estas calorías procederán de los alimentos y las reservas energéticas y, en función de si se consume más o menos, nos encontraremos en un déficit calórico o en un superávit calórico. Esto es lo que hará que perdamos o ganemos peso.
Las dietas enfocadas en la pérdida de grasa se basan en mantener un déficit calórico. Por el contrario, aquellas cuyo objetivo es ganar tejido muscular para optimizar el rendimiento deportivo han de contar con un superávit.
La importancia de conocer el propio metabolismo
En este artículo hemos visto, de forma muy simplificada pero didáctica, cuáles son las bases del metabolismo energético. Se trata de un conjunto de reacciones que abarcan el anabolismo y el catabolismo, ambos procesos imprescindibles para el mantenimiento del organismo.
Te animamos a estudiar más sobre el tema, especialmente en fuentes académicas, pues esta será la mejor forma de entender el cuerpo y aplicar diferentes técnicas para lograr los objetivos deportivos.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
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